Dar y recibir. Este es el deseo al iniciar mi comunicación con la blogosfera (!qué expresión tan pedante ! ). Mensaje en la botella y ...!a esperar!
jueves, 26 de noviembre de 2009
El cuaderno dorado
Llevo mucho tiempo leyendo este libro ( tan complejo ) de Doris Lessing.
Parece mentira que haya sido escrito hace medio siglo y que su pensamiento sea tan actual.
La mirada sobre el mundo femenino es tan profunda que poco más podría añadirse a estas reflexiones . Los cuatro cuadernos que componen el libro ( El rojo :una mirada a la política desde un compromiso claro con las denuncias, empezando por el Partido Comunista, al que perteneció y a las múltiples secuelas del comunismo ).
El cuaderno negro es sobre la vida de la escritora Anna Wulf, trasunto de la propia Lessing, a la que los sucesivos amores y desencuentros, la implicación familiar y de amistad, y su depresión la llevan al psicoanálisis con Madre Azúcar, como llama a su terapeuta
En el cuaderno amarillo escribe historias que pertenecen a su propia experiencia y , el cuaderno azul, su diario.
Esta compleja estructura la lleva a reunir todos los cabos sueltos en el quinto cuaderno, el dorado,
y con él busca su entendimiento de su vida y la de los seres que la rodean.
La relación intensa con su amiga Molly y el hijo de ésta , Tommy así como la dificultad de entendimiento con él, que las ve como a dos mujeres que han vivido muy libremente, siempre con un compromiso político y social- que les echa en cara- y la posterior experiencia con su propia hija- Janet- la cual decide, siendo muy niña, alejarse de su madre y pasar a un internado para no seguir sus pasos : quiere ser alguien normal , y Anna comprende y acepta lo que Janet está pidiendo.
De este libro se pueden sacar muchas conclusiones : todas referidas al enfrentamiento del mundo femenino con el poderoso y dirigente mundo del hombre.
No se cierra en el feminismo a ultranza, pues de ella misma- como representación de la mujer- extrae todos los fallos, errores o enquistamientos atávicos de la mujer, sin piedad con ella ni con nuestro mundo.
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