lunes, 15 de noviembre de 2010

Arde El Aaiun



Imagen sacada de "El Mundo" (MAP )





No es asunto que no nos incumba- aún sin caer en el "buenismo"- por diversas razones, la principal, el aplastamiento de Marruecos a una pequeña población de saharahuis.

No sé quien ni cómo se montó el campamento a pocos kms. de El Aaiun. Intuyo que hubo organización externa para en tan poco tiempo desplazar a tantos , montaje de jaimas, aprovisionamiento externo, etc...Pero lo que reivindicaban era simple : puestos de trabajo que les son negados a la población saharahui, sólo acceden a los de escasa entidad y, en segundo lugar pedían mejor acceso a viviendas.

Al ser territorio dominado por los marroquíes tras la marcha verde, se ha convertido en tierra "robada" y, aunque en un principio el independizarse de España fuera un logro para todos, al poco tiempo se vio que el territorio había pasado a tener nuevo propietario: Marruecos. A los saharahuis les ha ocurrido como a los palestinos con Israel y,aunque han sido más sufridos, desde los campamentos de Tinduf en Argelia han mantenido la llama de la independencia con el Polisario, como fuerza política en clara desventaja con el poderoso vecino.

La ONU decretó hace muchos años un referendum para que la población decidiera - o no -su independencia. No se ha podido celebrar por innumerables trabas marroquíes al recuento de cidadanos saharahuis, siendo ahora muchos más los marroquís que los primitivos habitantes del Sahara Occidental.

El cerrarse Marruecos a la información externa, no manipulada por su Gobierno, hace que se estén jugando la vida los activistas que no han querido dejar la ciudad, a su vez conscientes de ser el enlace necesario con el exterior, aunque poco puedan hacer - de momento - para evitar las torturas y secuestros de la población saharahui.

España no está ni se la espera. Muchos son los intereses económicos entre ambos países y muchos los geoestratégicos en relación al control de la entrada de parteras, el narcotráfico, y el miedo al terrorismo islámico.

Pero hay otro peligro aún mayor si no se pone freno a la cacería: una guerra en el Sahara Occidental involucraría- lo queramos o no - a España. Demasiado cerca Ceuta y Melilla, demasiado cerca las Islas Canarias.

La Unión Europea calla, la Onu ha dejado que - con el pretexto de velar por su segurid -hayan aislado en El Aaiun a sus representantes, Canarias tiembla porque su única economía hoy depende del turismo. Este negocio no se lleva bien con ningún conflicto bélico, la muy numerosa población saharahui asentada enlas islas nos perdonarían y quien sabe si se infiltrarían elementos poco pacíficos entre ellos,tampoco saldrían bien los múltiples negocios entre Marruecos y Canarias ( amén de otros nacionales de más envergadura ).

¿Hace bien España en mirar hacia otro lado? Ni moralmente, ni prácticamente parece una decisión acertada. Hay que multiplicar los acuerdos europeos e internacionales. Hay que pacificar la zona.Ya estamos llegando tarde.