domingo, 30 de noviembre de 2008

La Fura del Baus y el terrorismo

Su actuación en Las Palmas ha coincidido con los ataques terroristas en Bombay y la indigna fuga a todo trapo de Esperanza Aguirre, dejando sola a la Delegación empresarial que se quedó allí.

El Gobierno Hindú ha sido muy efectivo y no aceptó la más mínima negociación.
Todos han vuelto a sus respectivos países, pero si éste es el nuevo modus operandi del terrorismo internacional resulta muy preocupante. Nada menos que ocho actuaciones simultáneas en un ciudad ...no son fáciles de repeler y multiplica el número de víctimas enormemente ( y, me temo, que la mayoría son eso, víctimas inocentes a las que el ataque cogió en medio, pues a los terroristas no se les puede llamar así, si la defensa de una causa es justa no puede hacerse justificando los "medios" con el fin).

Esa fue una razón adicional por la que tenía mucho interés en ver la última puesta en escena de La Fura : "Boris Godunov".
Se trata de un texto muy trabajado, a tres bandas, cuyas implicaciones van enredándose y coincidiendo en un mismo mensaje : el terrorismo y el poder.
El supuesto grupo de teatro está interpretando el acceso homicida al poder de Boris Godunov, tras el asesinato del zarevich Dimitri.
Una vez en el trono descubre su verdadero rostro de tirano.
En este punto de la representación, se interrumpe esta historia pues los terroristas han entrado en el teatro y cogen como rehenes a los espectadores.
En el Teatro de Moscú donde se produjo el ataque tuvo que vivirse un drama y una angustia terribles. Estando encerrados en otro Teatro lo sientes, es sólo una sala, no te puedes mover de tu asiento sino para ir al baño- y acompañado- ni la comida ni el agua llegaron por deseo de los terroristas , nadie fue canjeado y así durante tres días.
La Fura ha sabido- como casi siempre- montar un espectáculo, aquí muy apoyado por medios audiovisuales que dan ritmo a las casi dos horas de "encierro". La integración del público se consigue sin sacar a nadie de su asiento : han colocado diversas cámaras en el propio teatro donde estás contemplando la obra y reconoces sus pasillos, su entrada , lugares proyectados simultáneamente por donde los ves correr con sus ametralladoras. Muy buen montaje, en definitiva.

Sólo me llamó la atención que no se quisiera personificar el poder en Putin , siendo esta una historia conocida...como conocido fue el trágico final al que este hombre, procedente del KGB,
impuso a los antiterroristas : acabar al precio que fuera.
Siendo la obra una meditación sobre el terrorismo y cómo los fines no justifican los medios, tan terroristas fueron unos como otro, pues no se pudo ocultar el horror cuando la prensa mundial destapó la cantidad de cadáveres que allí quedaron tras la" liberación".
Probablemente la respuesta quedara implícita en la falsa representación del Boris Godunov : el Poder tiende a olvidar los "medios"

Todavía está por cuantificar el número de muertos en los Hoteles de Bombay y cuántos inocentes no pudieron ser salvados.